Casa de Aldea de construcción rústica con una fachada marcada por los gruesos marcos de madera maciza en sus paredes de piedra y las puertas con cuarterón. En su interior vigas, pontones, tarima y escalera de madera y cargaderos de roble en puertas y ventanas culminan el estilo tradicional.
Decorada con muebles antiguos de distintas épocas: comedor de nogal, habitaciones de cerezo y castaño, camas de hierro y haya, tulipas antiguas, cuadros de punto de cruz,...
Casa Quinta les ofrece dos viviendas independientes: Casa Quinta I y
Casa Quinta II.
Ambas disponen de dos plantas:
En la primera: cocina y salón comedor con chimenea de leña.
En la segunda: dos habitaciones dobles, una matrimonial y baño completo.
Portal y jardin delante de la casa.
Equipamiento: